Especie: Jilguero
Nombre en latĂn: Carduelis carduelis carduelis
Nombre en inglés: Goldfinch
Orden: Paseriformes
Familia: Fringillidae

DescripciĂłn:
Hace algunos años descubrĂa en la revista “Le monde des oiseaux”, de l’AOB, unas magnĂficas lĂĄminas en color de Herrmann Heinzel que describĂan algunas mutaciones de paseriformes.
Entre estos grabados figuraba un jilguero con una diluciĂłn muy marcada que me hizo soñar durante mucho tiempo con sus tonos pastel y cĂłmo resaltaban el antifaz rojo y sus barras alares. El tiempo ha pasado y la vida me ha permitido criar jilgueros en mutaciĂłn y observarlos tambiĂ©n en distintos criaderos de aficionados. AquĂ os dejo una presentaciĂłn de las distintas mutaciones que, asĂ lo espero, van a interesaros. Estas lĂneas permiten demostrar que tanto en este magnĂfico carduelino como en muchas otras especies, a veces aparecen algunas modificaciones de genotipo y de fenotipo que conviene preservar y comprender.Antes de descubrir estas mutaciones tomĂ©monos un tiempo para recordar el fenotipo salvaje del jilguero:
FENOTIPO SALVAJE:
No existe dimorfismo sexual entre el macho y la hembra del jilguero. La cabeza del jilguero es alargada y presenta un antifaz rojo con casco negro. El lomo es pardo, las alas son negras con barras alares de color amarillo chillĂłn. El obispillo es blanquecino o blanco dependiendo de la subespecie. La cola es negra con motas blanquecinas cuyo tamaño y nĂșmero varĂan dependiendo de la subespecie. El pecho es blanco, estĂĄ rodeado de manchas de color pardo en forma de champiñón. El pico es rosĂĄceo con un trazo negro en la mandĂbula superior fuera de la temporada de crĂa (completamente rosa en perĂodo de reproducciĂłn).
El sexado de estas aves no es fĂĄcil debido a la ausencia de dimorfismo sexual. Aunque con un poco de costumbre podemos tener en cuenta los siguientes criterios para proceder a la selecciĂłn de los reproductores. Estos criterios son, sin embargo, menos evidentes cuando nos encontramos frente a una mutaciĂłn con una fuerte diluciĂłn de melanina.
Tras observar el dibujo del antifaz rojo nos damos cuenta de que la mayorĂa de los jilgueros macho tienen un contorno irregular que desborda a la altura del ojo y se prolonga hacia los lados de la cabeza. La hembra posee un antifaz rojo mĂĄs discreto y mĂĄs redondeado (veremos mĂĄs adelante que en segĂșn quĂ© mutaciones el antifaz rojo desaparece dando paso a un antifaz naranja rojizo, a veces naranja marfil, en estos casos la propagaciĂłn es mucho menos clara).
Tenemos que observar tambiĂ©n las escapulares que cubren la hoja escapular (coberteras). En el fenotipo salvaje estas pequeñas plumas son de color gris pardo en la hembra y negro intenso en el macho. Cuando nos encontramos ante sujetos mutados observamos una diferencia a nivel de la intensidad del pigmento.Podemos observar en muchos de los machos, a nivel del champiñón blanco del pecho, algunas plumitas amarillas inexistentes en la mayorĂa de las hembras. Este detalle tambiĂ©n puede aplicarse para el sexado de los jĂłvenes. Cuidado porque algunas hembras mayores pueden presentar algunas plumillas amarillas.
No obstante, si tenemos en cuenta los distintos criterios podremos hacernos una idea del sexo de los pĂĄjaros que tenemos para no cometer errores en el emparejamiento. Cuando los jilgueros estĂĄn en la mejor de las formas, finales de abril principios de mayo, podemos ver el cortejo antes del apareamiento (ver vĂdeo en esta pĂĄgina).